El presidente del Concejo Deliberante, Carlos Traficante, respondió mediante una nota al concejal de La Libertad Avanza, Marcelo Montagna, quien también por escrito había presentado una objeción formal a la obligatoriedad de participar en las capacitaciones establecidas por la denominada Ley Micaela.
En su respuesta, Traficante sostuvo que la normativa no vulnera la libertad de pensamiento, conciencia ni expresión. La aclaración surge luego de que Montagna manifestara que los contenidos impartidos en dichas capacitaciones responden a enfoques ideológicos vinculados al feminismo y a la denominada ideología de género, con los cuales expresó no estar de acuerdo.
En ese marco, Traficante le indicó que, si considera que la ley es perfectible o que debería contemplar la objeción de conciencia, debe canalizar ese planteo a través de los legisladores de su propio espacio político. En ese punto, mencionó expresamente al diputado nacional Pablo Ansaloni, oriundo de Colón.
En la nota presentada oportunamente por Montagna, el edil aclara que no desconoce la vigencia de la normativa, aunque deja constancia de su disidencia respecto del carácter obligatorio de este tipo de instancias formativas.
Por su parte, Traficante señaló que invitó al bloque de La Libertad Avanza a participar de la capacitación, remarcando que “no solo es cumplir con una obligación legal, sino asumir la responsabilidad de prevenir violencias y construir respuestas estatales más justas y eficaces”.
Finalmente, le solicitó a Montagna que recapacite y cumpla con la institucionalidad que regula su rol como concejal, destacando la importancia de contar con herramientas para identificar situaciones de violencia por razones de género o diversidad sexual y poder orientar adecuadamente a los vecinos y vecinas que lo requieran.
