Los ciberdelincuentes han perfeccionado distintas modalidades de fraude telefónico para suplantar a entidades financieras y engañar a sus víctimas. A través de llamadas en las que se hacen pasar por empleados bancarios, intentan obtener información confidencial —como contraseñas, claves de seguridad o datos de tarjetas— con el objetivo de acceder a las cuentas y sustraer dinero.
En las últimas horas se registraron al menos dos estafas en la ciudad de Colón. En uno de los casos, una persona recibió un llamado de alguien que se presentó como personal del Banco Macro. Durante la comunicación, le solicitaron datos personales y realizaron un supuesto escaneo biométrico facial. Posteriormente, la víctima advirtió movimientos irregulares en su cuenta, donde se efectuaron tres transferencias: dos por un monto de 1.000.000 de pesos cada una y otra de 95.000 pesos.
En el segundo hecho, un estafador que se hizo pasar por empleado de Mercado Pago solicitó información confidencial. Más tarde, la víctima constató que desde sus cuentas del Banco Nación y del Banco Provincia le habían sustraído 530.021 y 121.021 pesos, respectivamente.
Cabe recordar que, según informan las entidades bancarias, ninguna institución financiera solicita por teléfono contraseñas, códigos de seguridad, datos biométricos ni información completa de tarjetas de crédito o débito. Ante cualquier pedido de este tipo, bajo el pretexto de verificar la identidad del cliente, se trata claramente de una estafa y se recomienda cortar la comunicación y realizar la denuncia correspondiente.
