La Sala de Oncología del Hospital Municipal de Colón celebró sus primeros seis meses de funcionamiento, consolidándose como un espacio clave para el tratamiento oncológico en la ciudad. La Dra. Lorena Boixadera, médica oncóloga a cargo del servicio, hizo un balance del crecimiento del área, destacando la posibilidad que hoy tienen los vecinos de Colón de acceder a terapias sin necesidad de trasladarse a otras localidades.
“Iniciamos hace medio año con una necesidad concreta: brindar atención oncológica en Colón. Hasta entonces, muchos pacientes debían viajar para recibir sus tratamientos. La creación de esta sala representó un paso muy importante para mejorar su calidad de vida”, explicó Boixadera.
La profesional subrayó que el espacio fue diseñado especialmente para atender a personas con patologías oncológicas, con una infraestructura pensada para su bienestar: “Es un lugar exclusivo, con ingreso diferenciado y una enfermera dedicada exclusivamente al área. Eso nos permitió trabajar de una manera mucho más contenida y especializada”.
En los primeros meses, la atención se realizaba con pocos pacientes y en espacios comunes. Hoy, la realidad es muy diferente. “Pasamos de un volumen muy bajo de infusiones a tratar entre 40 y 50 pacientes mensuales. Es un número significativo, porque son personas que antes tenían que irse a otras ciudades, y ahora pueden quedarse en Colón, cerca de sus familias y su entorno”, señaló.
El servicio no solo atiende a pacientes del hospital público, sino también de otras instituciones médicas, obras sociales como PAMI, IOMA y mutuales gremiales. Además, se realizan tratamientos ambulatorios, infusiones continuas y esquemas variados según el caso clínico.
Boixadera remarcó que este avance fue posible gracias al trabajo coordinado con el municipio y al acompañamiento de un equipo interdisciplinario: “Yo soy una de las caras visibles, pero somos muchos los que trabajamos para que esto funcione. El personal de enfermería, las trabajadoras sociales que gestionan los traslados, el equipo administrativo que coordina turnos secuenciales, las psicólogas que brindan contención a pacientes y familias, y Nati, que es el nexo fundamental con el Banco de Drogas de Nación y Provincia, son pilares clave de este servicio”.
En este marco, adelantó que está trabajando junto a la Secretaría de Salud para sumar nuevas instancias de acompañamiento emocional. “Queremos implementar charlas para pacientes y sus familias, encuentros grupales, espacios de contención que complementen el tratamiento médico. La dimensión humana del cáncer es igual de importante que la clínica”, afirmó.
Finalmente, la Dra. Boixadera destacó el orgullo personal que le genera poder desarrollar este proyecto en su ciudad natal: “Me emociona profundamente que este servicio crezca en Colón, donde nací, y desde donde siempre aposté por la salud pública. Queremos que la gente sepa que acá podemos hacer mucho, con compromiso y responsabilidad”.
La Sala de Oncología se consolida así como un referente en la región, con una mirada centrada en el acceso, la dignidad y la calidad del tratamiento para pacientes oncológicos.