En la sesión de anoche en el Concejo Deliberante ingresaron dos notas presentadas por vecinos solicitando la regularización de loteos y la instalación del servicio de energía eléctrica en sectores ubicados en las zonas de calle 50 entre 135 y 137 y de calle 44 entre 136 y 137.
Primera nota: Sector calle 50 entre 135 y 137
Fue presentada por el vecino Héctor Daniel Van Becelaere, domiciliado en calle 50 y 137, quien indicó que él y un grupo de vecinos, que accedieron a los lotes de buena fe y mediante facilidades otorgadas, solicitan:
• La extensión de la urbanización.
• La autorización y regularización administrativa del loteo.
• La instalación del servicio de energía eléctrica.
La zona corresponde a la siguiente nomenclatura catastral:
Circunscripción 1, Sección M, Chacra 180, Quinta 0, Fracción 0, Manzana 0, Parcela 1D, subparcelada.
La nota señala que el sector presenta carencias de servicios esenciales, especialmente la falta de luz eléctrica, lo que limita el desarrollo habitacional, la accesibilidad y las condiciones básicas de vida.
Los vecinos firmantes se ponen a disposición para aportar documentación o información adicional.
2. Segunda nota: Sector calle 44 entre 136 y 137
Ingresó otra nota de características similares de vecinos que también adquirieron sus parcelas de buena fe.
El pedido contempla:
• Incorporar el sector a los planes municipales de urbanización.
• Autorizar y regularizar el loteo correspondiente.
• Avanzar con la provisión y habilitación del servicio de energía eléctrica.
La nota remarca la carencia de servicios esenciales y su impacto en la calidad de vida de quienes residen o planean radicarse en el lugar.
3. Tratamiento legislativo del expediente
Tal como se acordó en la Labor Legislativa, los expedientes serán girados a las Comisiones de Legislación y de Obras Públicas, para su tratamiento y análisis detallado.
Previo a la sesión, se conversó con vecinos para explicarles el procedimiento, aclarando que no se desatiende su reclamo, sino que el pase a comisión permite un estudio más profundo y adecuado.
4. Participación vecinal
El concejal Julio Alvarez solicitó que, durante el análisis del expediente en comisión, se invite a participar a vecinos involucrados, a fin de aportar información, evacuar dudas y colaborar en el tratamiento.
Finalmente, se acordó que el expediente será analizado en comisión y que se convocará a los vecinos oportunamente.
26/11/25 – La problemática de los terrenos sin servicios y su origen estructural
La situación de los lotes adquiridos en zonas no habilitadas según la ordenanza de zonificación refleja una problemática que excede lo urbanístico y se enmarca en cuestiones económicas y sociales más profundas. Muchos vecinos accedieron a estos terrenos porque su valor era sensiblemente inferior al de los lotes ubicados dentro del área autorizada para la expansión urbana. Esa diferencia de precios, en contextos de alta demanda habitacional y dificultades de acceso a la tierra, empuja a numerosas familias a optar por alternativas que, si bien representan una solución inmediata, no siempre cumplen con los requisitos legales o ambientales necesarios.
A ello se suma que, en algunos casos, hubo un aprovechamiento de estas necesidades: se comercializaron lotes en zonas que no pueden ser urbanizadas bajo ningún concepto, como áreas de humedales, (no es el caso de los lotes de Van Becelaere) que requieren preservación ambiental y cuyo uso habitacional está prohibido. Esta situación no solo vulnera derechos de quienes compran de buena fe, sino que genera conflictos posteriores que comprometen tanto al Estado como al ambiente.
Debe reconocerse que en momentos en los que estas prácticas se realizaban, faltó la intervención oportuna del Municipio para frenar procesos de loteo ilegales, inspeccionar, sancionar y evitar que avanzaran subdivisiones que no cumplían las normativas vigentes. Tal vez por ausencia de alternativas habitacionales, por laxitud en los controles o por presión social, se permitió que estos asentamientos se consolidaran. El problema es que, una vez vendidos los lotes y edificadas viviendas, los vecinos reclaman servicios e incluso la posibilidad de escriturar, pero se encuentran con un claro impedimento legal: el suelo no está habilitado para urbanizarse.
Frente a este escenario, una posible salida —aunque compleja— es la modificación de la ordenanza de uso de suelos para incorporar algunos de estos sectores al área urbana o de expansión urbana. Este proceso requiere estudios técnicos, evaluaciones ambientales, infraestructura posible y una decisión política de gran alcance. Sin embargo, debe dejarse absolutamente claro que los humedales no pueden ser incluidos en ningún procedimiento de regularización. Son áreas que deben preservarse por su rol ambiental, por los riesgos que implican para la vivienda y porque la normativa superior —provincial y nacional— lo impide.
En síntesis, la problemática actual es la consecuencia de un conjunto de factores: necesidades económicas, ausencia de oferta de lotes accesibles, controles insuficientes y comercializaciones irregulares. La solución exige una respuesta integral y responsable que contemple la situación de las familias, respete la legalidad vigente y preserve los sectores ambientales críticos.
