Carolina Jaureguizhar expresó su emoción por haber participado por primera vez en la Marcha del Orgullo junto a su familia. Recordó que ya se realizaron marchas en distintos puntos del país y que la principal tuvo lugar el 1 de noviembre en la Ciudad de Buenos Aires, comenzando con una feria en Plaza de Mayo y avanzando luego por la Avenida de Mayo hasta el Congreso.
Carolina describió la jornada como un momento de profunda emoción, al ver miles de personas marchar “con alegría, respeto y convicción”. Señaló que el Orgullo es un acto de amor, memoria y defensa, donde cada bandera representa historias de lucha, resistencia y derechos conquistados con enorme esfuerzo.
También manifestó preocupación ante el avance de discursos de odio y decisiones del gobierno nacional que podrían amenazar esas conquistas. “El silencio también es retroceder”, afirmó, remarcando que el orgullo no es sólo una celebración, sino una expresión de dignidad.
Sostuvo que defender los derechos conquistados es defender la libertad, la igualdad y la democracia, y advirtió que cuando se persigue o se calla una voz política, la democracia se debilita. “No vamos a dar un paso atrás”, expresó, concluyendo con el reclamo de Cristina libre, el pueblo con derechos y el orgullo presente en las calles.
