Las lluvias que superaron los 70 milímetros en nuestra ciudad y la zona de influencia fueron una verdadera bendición para los campos. Las precipitaciones del fin de semana en gran parte de la región agrícola núcleo han sido un bálsamo para los cultivos de trigo, que se encontraban en una situación crítica debido a la escasez de agua y las bajas temperaturas. Según informó la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), estas lluvias ayudarán a revertir el estado de los cultivos, muchos de los cuales ya mostraban signos de deterioro.
La entidad rosarina había advertido previamente que la falta de precipitaciones había llevado al 10% del trigo a estar en condiciones de regulares a malas. Sin embargo, la recuperación de la humedad en los suelos ha sido muy satisfactoria, con lluvias que superaron los treinta milímetros en varias zonas. Esto no solo evitará mayores deterioros en los cultivos de trigo, sino que también permitirá relanzar las siembras de maíz, muchas de las cuales se habían postergado por la falta de agua.