Recientemente, un devastador incendio consumió por completo una vivienda ubicada en la calle 127, entre 51 y 52. El fuego destruyó todo lo que había en el interior. La casa era alquilada por una trabajadora de la Escuela 4, y en el momento del siniestro, su hijo, estudiante de la Escuela Técnica, se encontraba durmiendo. Afortunadamente, con la ayuda de los vecinos, logró rescatar algunos objetos personales.
Aunque han pasado varios días desde el trágico incidente, la situación sigue siendo crítica. La damnificada ha recibido muestras de solidaridad de conocidos y vecinos, quienes le han ofrecido ropa y algunos artículos básicos. Sin embargo, lo más urgente, encontrar un lugar donde vivir, aún no ha sido resuelto.
La vivienda incendiada era alquilada a través de una inmobiliaria. A pesar de que la trabajadora afectada pagó el mes de alquiler para no comprometer la garantía, su situación no ha mejorado. Se dirigió a la Municipalidad en busca de ayuda, donde le prometieron algunos elementos esenciales, los cuales recibirá cuando consiga un lugar definitivo, ya que por el momento está alojada en la casa de una amiga.
En cuanto a su necesidad más apremiante, un nuevo lugar donde vivir, se le ofreció apoyo municipal para cubrir el depósito inicial del alquiler. Además, recibirá un aporte mensual durante un tiempo mientras logra recomponer lo que perdió en el incendio. Es destacable la rápida respuesta y actitud del Municipio, especialmente en momentos tan difíciles como este.