El presidente del Consejo de Administración de la Cooperativa Eléctrica de Colón brindó precisiones sobre la situación económico-financiera de la institución, luego del reciente acuerdo con CAMMESA para regularizar una deuda importante acumulada durante la pandemia.
“Primero concentramos toda la deuda en CAMMESA y comenzamos un proceso de ordenamiento”, señaló el dirigente, quien destacó que uno de los pasos fue la reestructuración del plantel de personal. “Pasamos de más de 100 empleados a menos de 100. En algunos casos, los puestos que se jubilaban no fueron renovados, aunque en áreas clave como Luz y Fuerza sí se mantiene la reposición, porque es fundamental asegurar un servicio eficiente”.
Uno de los principales desafíos sigue siendo el servicio rural, que implica grandes costos y poca rentabilidad. “Tenemos más de 300 kilómetros de línea rural y apenas 260 usuarios. Es netamente deficitario, pero como cooperativa asumimos la función social de llegar a donde otros no llegan”, remarcó. En ese marco, informó que se incorporó una Toyota 4×4 cero kilómetro mediante el plan de ahorro Farcam, específicamente para mejorar la cobertura rural.
También se están realizando mejoras en el área urbana. “Dentro de la ciudad hay otros 300 kilómetros de líneas eléctricas. Adquirimos una Ford Transit que será equipada con herramientas para atender rápidamente cualquier inconveniente en la zona céntrica. Hasta ahora contábamos con un solo vehículo de ese tipo”.
En cuanto al tendido eléctrico en barrios nuevos, aclaró que “cuando se realiza un loteo, el desarrollador es quien paga el tendido de líneas, que son preensambladas, seguras y preparadas para que el lote cuente con electricidad desde el primer momento”.
Consultado sobre los costos del servicio eléctrico, respondió: “A veces se compara con lo que se paga en grandes ciudades como Buenos Aires o Rosario, pero allá en cuatro cuadras concentran miles de usuarios. Acá tenemos que mantener cientos de kilómetros con mucha menor densidad de consumo. Es una realidad totalmente distinta”.
Sobre la situación de la cobranza, fue optimista: “La nuestra es una de las cooperativas con mejor índice de cobranza en la provincia de Buenos Aires. La gente sabe que la electricidad es esencial y hace un esfuerzo por mantenerse al día. En los casos de deuda, se busca refinanciar para evitar cortes”.
Finalmente, reconoció que “puede haber casos donde algún empleado tenga un trato menos cercano con el usuario, pero el objetivo es siempre buscar soluciones y asegurar el acceso a la energía”.