Ayer 7 de agosto se conmemoró el Día de San Cayetano, patrono del Trabajo. En nuestro medio, como todos los años, los vecinos se dieron cita en la capilla que lleva su nombre junto a los barrios Obrero y Mirador del Lago. Como siempre la gente respondió a la cita para pedir, y otros para agradecer el empleo, en estos tiempos tan complicados para los trabajadores.
A pesar que el clima no ayudó, la respuesta fue numerosa. Vecinos y vecinas participaron de la procesión que comenzó en las inmediaciones de la Capilla, la que concluyó con una misa. La segunda misa tuvo lugar a las 20:00 en el mismo templo.
Se trata de un encuentro de creyentes y vecinos que todos los años piden o agradecen y que se repite en casi todas las ciudades del país, en especial en el barrio de Liniers en Buenos Aires.